La importancia de consumir legumbres para nuestra Salud

Las legumbres son una fuente rica de proteínas y aminoácidos esenciales que sirve de complemento perfecto a los cereales. Aportan una cantidad importante de hidratos de carbono y micronutrientes, así como fibra alimentaria de calidad.

La importancia radica en el contenido de sus nutrientes y en la capacidad que tienen para enfrentar a la inseguridad alimentaria y lograr dietas sanas y equilibradas para la población.

Las legumbres son semillas nutritivas para un futuro sostenible, provienen de las plantas leguminosas, como lentejas y garbanzos contienen cantidades sustanciales de micronutrientes, fibra dietética y minerales, y son una fuente importante de proteínas vegetales.

Su bajo contenido en grasas y la interacción de sus esteroles se ha demostrado eficaz para mantener niveles bajos de colesterol LDL y reducir la presión arterial.

¿Cómo pueden ayudarte a perder peso?

Es cierto que las legumbres son energéticas, pero no necesariamente calóricas, al menos no en nuestro prejuicio habitual que asocia las calorías con “engordar”. En realidad son alimentos de baja densidad calórica al aumentar su volumen durante la cocción; son fuente de hidratos complejos de bajo índice glucémico, bajas en grasas, ricas en fibra y muy saciantes.

Además nos proporcionan proteínas vegetales que, bien combinadas en una dieta equilibrada y variada, pueden ser perfectamente completas, adecuadas para todas las personas y todas las edades, siempre adaptando su consumo a necesidades particulares.

10 Razones para Consumirlas

  1. Son una fuente excelente de proteínas vegetales. Por ejemplo 100 gramos de lentejas crudas contienen 25 gramos de proteínas. Para aumentar la calidad de la proteína de las legumbres cocidas es interesante consumirlas con cereales, como el arroz.
  2. Son ricas en fibra, lo que mejora la salud digestiva y reduce los riesgos de sufrir enfermedades cardiovasculares.
  3. Son bajas en grasas y no tienen colesterol, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
  4. Pueden almacenarse durante mucho tiempo y, de esta manera, consumirse a lo largo de todo el año, lo cual es esencial en los países en desarrollo.
  5. Son una buena fuente de hierro, lo cual puede evitar la desnutrición y la anemia. Para mejorar la absorción del hierro es recomendable combinarlas con alimentos que contengan vitamina C, como el limón.
  6. Son ricas en potasio, un nutriente esencial para el buen funcionamiento del corazón, el sistema digestivo y los músculos.
  7. Tienen un índice glucémico bajo, lo cual ayuda a controlar el azúcar en sangre y los niveles de insulina, lo cual les convierte en un alimento fundamental para las personas con diabetes y son ideales para controlar el peso.
  8. Son bajas en sodio. El cloruro de sodio -o sal- contribuye a la hipertensión y se puede evitar consumiendo alimentos bajos en sodio como las legumbres.
  9. No contienen gluten en su estado natural de modo que es un alimento apto para celíacos e intolerantes al gluten.
  10. Son una fuente excelente de folato, un tipo de vitamina B esencial para el sistema nervioso y que es de especialmente importante para prevenir anomalías en el feto durante el embarazo.